Stoner
© Editorial: Ediciones de Baile del Sol
Colección: Narrativa
© Traducción: Antonio Díez Fernández
3ª edición: diciembre de 2011
246 páginas
ISBN: 9788415019848
Cuando el escritor Ian McEwan leyó Stoner dijo que estaba sorprendido de que una novela tan buena
hubiera podido pasar tan desapercibida durante tanto tiempo. No le faltaba
razón porque es lo mismo que está bullendo en el sentir general de los lectores
que se están acercando a la novela del escritor estadounidense John
Williams.
Yo me acerqué a la novela después de ver varias reseñas entusiastas de
blogueros a los que sigo habitualmente, de no haber sido por eso igual me habría quedado en la mesa de los
más vendidos de las librerías y me habría perdido esta soberbia novela (mis felicitaciones a Baile del Sol por contar con esta joya en su catálogo) de la que honestamente pienso que ni la portada tan anodina, ni el título, que no dice nada, le benefician en
lo más mínimo.
Pero ¿de qué va Stoner?
Pues mirad, os lo voy a decir con una frase de Tom Hanks, sí, el mismo, el
famosísimo actor: “Se trata simplemente de una novela sobre un tipo que va
a la universidad y se convierte en un maestro. Pero es una de las cosas más
fascinantes que jamás he encontrado.”
Francamente, pese a todas las alabanzas que he leído de la crítica
profesional sobre el libro, ninguna me ha parecido tan directa y acertada como la de Tom Hanks, p orque en
realidad eso es Stoner, la historia
de un tipo que se convierte en maestro, así de simple y así de fascinante.
Varias cosas me han llamado la atención de la novela. La primera es
la pericia del escritor al condensar en tan pocas páginas toda la vida de una
persona. Hay escritores que para eso mismo habrían llenado 1000 páginas y
probablemente les habría quedado un folletín de mucho cuidado, pero este hombre
ha sido capaz de hacerlo gracias al detalle preciso, al uso más que concreto (que no
simple) de los sustantivos, verbos, adjetivos, adverbios... Una prosa eficaz, la
más adecuada, la perfecta elección de las palabras y la perfecta conjugación de
frases consiguen que se llegue a transmitir toda la vida de un personaje en un
libro que no llega ni a las 250 páginas. Y eso no es solo economía del lenguaje,
porque se puede economizar pero no acertar en la elección del vocabulario, es
sentir que ninguna palabra podría haber sido más acertada que la escrita,
sentir que ninguna otra expresaría de forma tan clara lo narrado. Desde aquí me
gustaría felicitar también al traductor de la novela porque os puedo asegurar
que no me he encontrado ninguna palabra ni expresión que sonara fuera de lugar,
de manera que también un bravo para él.
Stoner es una historia sencilla, escrita de
forma amena, entretenida, fluida, y además fácil de leer, y con todos esos atributos
que para muchos ya serían suficientes para tildar una novela como de mediocre,
siente el lector sin embargo que tiene en sus manos un libro con sabor a buena
literatura, lo que demuestra que no hacen falta frases despampanantes para lograr una buena novela, lo que hace falta es talento y buena técnica, y
sin duda John Williams los posee.
Pero la mayor genialidad de Stoner
es precisamente su personaje, William, cuyo
apellido da vida al título; y aquí sí que me atrevería a ir más allá. Para
muchos las novelas de personajes son las buenas novelas de verdad, y si esto es
así, Stoner es entonces una obra
maestra. Y no deja de ser irónico porque el protagonista es un tipo de un gris
apagado, anodino, triste, cobarde, resignado, acomodadizo. Un personaje que parece puesto
para verlas venir y aguantarlas sin más, sin reaccionar, carente de interés y
entusiasmo excepto por la literatura; con un carácter que parece impropio de
una persona curtida en el mundo de las letras pero que no es sino un fiel
reflejo de su pasado, herencia de sus padres, de esa tierra que le dejó para
siempre una impronta de granjero del Missouri más profundo y deprimido.
Pero William Stoner es algo más, y ahí radica la grandeza del
personaje, porque esa especie de acomodo también le sirve para encarar
con una inmensa dignidad los palos que le da la vida (sublime cómo se enfrenta a su enfermedad), una persona que en un momento dado sí supo reaccionar al
abandonar sus estudios de agricultura por los de literatura. Un personaje que
en el fondo todo lo hace por amor, la causa más noble por la que se puede hacer
algo en esta vida, amor a la literatura, sí, pero amor al fin y al cabo.
Además Stoner es un tipo íntegro y noble y lo demuestra, una vez más, por amor a su profesión. El ejemplo más claro de esa integridad se refleja en una de las escenas más soberbias, fascinantes y con más ritmo
narrativo de toda la novela en la cual se enfrenta, aunque sea de un modo muy
particular, por causa de un alumno a sus compañeros de departamento aun
sabiendo lo negativo que eso puede resultar para su carrera. El amor a la
literatura volverá a triunfar nuevamente sobre el amor carnal que siente por una amante en la que encuentra una vía de escape a su fracasado matrimonio. El
amor, siempre el amor... pero en este caso al que siente como el más poderoso:
su profesión, sus letras. El amor también está presente cuando conoce a su
esposa, en la relación con su hija, un personaje que te encoge el corazón
porque la sigues desde que nació y cuando ves en lo que se ha convertido, en
otra víctima más de las circunstancias, sientes una lástima infinita.
El final del libro es una maravilla. Es un final tan esperado como
trágico y tan emotivo que sobrecoge. Contenido como toda la prosa del autor
pero narrado con tanta musicalidad, tanta poesía y tanto lirismo que el nudo en
la garganta no hay quien te lo quite.
Stoner es una lectura triste pero entrañable,
corta pero intensa. Soberbiamente narrada, reflejo de un estado de ánimo de
eterna melancolía y con un desenlace sublime. De verdad, hacedme caso: Stoner es un prodigio.
Al final de tantas críticas positivas voy a tener que leer el libro jeje !!
ResponderEliminarBesos
Eso me pasó a mí, que al final tuve que leerlo y ¡menos mal que lo hice! Bss.
EliminarPor fin tengo el libro y ya solo me queda ponerme con él. Tengo muchísimas ganas de leerla y más aún después de no haber encontrado ni una solo crítica negativa.
ResponderEliminarUn saludo.
Yo sí encontré una crítica negativa, peor, negativísima, de un lector que la criticaba en la reseña que publicaron los de la revista "Qué leer". Madre mía, pone el libro a caldo, obviamente yo no estoy nada de acuerdo, para mí ha sido una de mis mejores lecturas en muchísimo tiempo. Ojalá te guste. Besos.
EliminarY yo sin ponerme a leerlo. Me hace ojitos desde la librería... Besos.
ResponderEliminarManuela no vas a perder mucho tiempo porque ya ves que es un libro bastante corto, así que anímate, mujer, yo creo que puede gustarte. Besos.
EliminarEs una joya, de lo mejor que he leído en 2013, inolvidable, y el final....uf. Un abrazo!
ResponderEliminarLo tengo apuntado por las reseñas positivas que he leído en varios de los blogs que sigo, a ver cuando puedo ponerme con él porque espero disfrutarlo también
ResponderEliminarBesos
Pues lo apunto porque tan buenas recomendaciones no se pueden dejar pasar...
ResponderEliminarLa portada no me atrae nada y el nombre tampoco, coincido completamente contigo en que no ayudan a que se venda bien solo.
Besos y buen finde!
Me encantó, fue todo un descubrimiento y no tengo problemas al decir que me emocioné leyéndolo. Creo que un pedacito de W Stoner se ha quedado en mi corazón lector
ResponderEliminarBesos
Lo vi en una reseña en el blog de Mientrasleo. Entonces ya, puse la antena, y ahora me lo llevo. Besos.
ResponderEliminarHe leído también maravillas sobre este libro, lo tengo que conseguir ya porque me llama la atención lo bien que habláis todos de él.
ResponderEliminarUna reseña muy buena, Rebeca.
Besos!
Qué ganas tengo de leerlo!!
ResponderEliminarSólo he visto opiniones positivas sobre este libro...
Besotes
Lo tengo pendiente, que no paro de ver reseñas muy positivas de este libro.
ResponderEliminarBesotes!!!!
Madre mía, cuanta pasión en tu reseña. A mí también me habría pasada desapercibido si no fuera por tanta reseña positiva, en especial la tuya. Por tanto... ya está... anotado. :-). Abrazos.
ResponderEliminarYo también tenía muy buenas referencias de este libro, a la que se añade la tuya, muy contundente y convicente también. Si no lo he leído aun es por el respeto que le tengo y porque disfruto teniéndolo ahí a la espera :) No me preocupa que me emocione o que el final sea triste, al contrario, me gusta que los libros me emocionen ;)
ResponderEliminarUn detalle acordarse del traductor, que lo menciones ya habla mucho y bien de él.
Besos!
He pasado un poco por encima de tu reseña porque resulta que yo también tengo el libro y quiero mantener la mente clara antes de acercarme a él. Pero que te ha gustado y que a Ian Mc Ewan también eso me ha quedado claro, jaja. Besos.
ResponderEliminarA ver si me animo con él, que me ha gustado mucho cómo lo has descrito.
ResponderEliminarLo he,os leído praticamente en paralelo y ahora puedo comprobar que nuestras impresiones son bastante similares. Como he comentado en goodreads, hacia tiempo que un libro no me fascinaba como lo hizo Stoner. Un beso,
ResponderEliminarYo tampoco creo que me hubiese acercado a este libro sino hubiese sido por las reseñas que leí en la blogosfera. Lo tengo en casa y espero leerlo dentro de nada. A ver si me gusta tanto como a todo el mundo.
ResponderEliminarUn beso!
Una crítica estupenda y el tema me encanta por deformación profesional. Así que me la llevo apuntadísima.
ResponderEliminarBesos
Me gustó mucho este libro, igual que Butcher`s crossing. Este autor ha sido todo un descubrimiento. Besos
ResponderEliminar¡Mil gracias a todos por pasar! Este blog sería un cero patatero sin vuestros comentarios.
ResponderEliminarTengo que leer Stoner; lo tengo pendiente, pero a veces me olvido de que está ahí... Le pondré remedio este año, seguro. 1beso!
ResponderEliminarEspero que este año tenga su oportunidad. Solo veo reseñas positivas de esta novela. Besos.
ResponderEliminarHe visto Stoner y los ojos me han hecho chiribitas, lo reconozco, me caló hondo este libro y el personaje es de los inolvidables. Un placer ver que va llegando a más gente y leer tu reseña.
ResponderEliminarBesitos
Pues tendré que animarme que parece que me estoy perdiendo algo bueno,
ResponderEliminarbesucus
Para los que dudan en leerla, dad el primer paso leyendo la reseña de la novela anterior, "Butcher´s crossing", en lanovelaantihistorica.wordpress.com. Después de eso seguro que corréis a la librería más cercana a por las dos.
ResponderEliminarHola.
ResponderEliminarLa verdad que da gusto encontrarse con libros de menos de 300 páginas. Creo que hoy en día crecen en exceso y sobran palabras.
Por lo demás pido permiso para quedarme por aquí
Si te interesa yo también tengo blog, aunque va de clásicos y está aún en crecimiento
http://leerclasicos.blogspot.com.es/
un saludo
Rubén
Yo lo he leído en catalán y coincido en que es una obra maestra. La historia que cuenta es muy común sobre todo en el ámbito universitario y yo estoy seguro que mas de un profesor conoce casos parecidos de las intrigas y odios soterrados entre colegas de un departamento. En cuanto al personaje pues es un antihéroe y quizas eso le hace más cercano, pues la mayoria somos imperfectos, algo cobardes e indecisos, al menos en lo que a mi respecta. Pero lo verdaderamente importante es la escritura en si ,el ambiente que recrea, lo que te hace vivir. Y el final es sublime. La literatura nos puede enseñar a vivir y está bien que también nos enseñe a morir. Es triste pero no es trágico porque el personaje se reconcilia con su pasado y adquiere el más preciado de los dones: la conformidad con lo inevitable.
ResponderEliminarAcabo de leer Stoner y sin lugar a dudas es un gran libro. Te hece sentir vivencias increibles pero para mi hay partes muy aburridas por lo que no llega a ser perfecto. Hay momentos aburridos por lo menos para mi. Le falta intensidad y argumento.
ResponderEliminarEee
ResponderEliminarSi entendéis que eso es una obra maestra, ni me quiero imaginar para vosotros que será una mala novela.
ResponderEliminar¡Menuda suma de cliches, de estilo vulgar! Ni una gota de talento en la trama, ni en el dibujo de los personajes. Descripciones insulsas, tópicas. Todo muerto. Embalsamado. Cartón piedra de cuarta. El inicio de las relaciones amorosas del protagonista parece sacado de la peor, cursi, putrefacta novela rosa. Su amor por la literatura, igual. Producen vergüenza ajena y después una sincera carcajada.Literatura de serie C. Literatura para señoritas ,desnutridas cerebralmente, de un internado del siglo XIX. Me alegro de que Nabokov esté muerto. Si lee esta mediocre, boba novela, le da la cena. Y él era de buen comer.
Bueno... cuestión de gustos. A mí este libro me llegó y por eso hablo bien de él y creo que estoy en mi derecho, ¿o no? ¿Literatura para señoritas desnutridas cerebralmente? Hombre... ahí te has pasado no tres sino cuatro pueblos. ¿Quién eres tú para permitirte hacer ese tipo de afirmación? De esa forma, en lugar de plasmar tu punto de vista sobre el libro -muy respetable- lo que dejas bien claro es que tienes una educación pésima y que eres un faltón de mucho cuidado. Y yo también me alegro de que Nabokov esté muerto, más que nada porque para mí "Lolita" es fruto de una mente babosa, sucia y depravada y que hoy en día probablemente hasta constituiría delito, pero claro, si eso es lo que a ti te gusta, comprendo perfectamente que "Stoner" te parezca deleznable, aquí no hay viejos babosos que se enamoren de niñas de 12 años. Feliz año.
EliminarEso creés entender porque no conociste una persona de esas características, que las hay. Y si tuviste la oportunidad de conocerlo, has sido incapaz de notarlo, de apreciarlo, de hasta admirarlo. No por lo que es, sino por lo que pudo haber sido por sus condiciones humanas. Un "si", si hubiese aprovechado "equella" oportunidad, si hubiera tenido una mejor compañía, si hubiese sido mejor valorado por sus amores, una persona de nombre "si"... y de apellido "pero". Pero no supo, pudo, quiso sacar provecho, no tuvo alguien que lo hiciera mejor a su lado, no fue tan amado como esperaba y quizás merecía.
EliminarUn taciturno personaje a quien uno casi llega a admirar, con su de estoicismo con que acepta sus desgracia, ese don de responsabilidad cotidiana y moral, que inmediatamente despierta la aprobación casi instantánea e impensada de los cercanos, pero que por lo mismo, por hacer lo que se espera siempre que haga, es inmediatamente olvidado (porque los demasiado cercanos lo menosprecian). Fuerte para soportar inmutable los golpes de la vida y su entorno más inmediato, pero débil para rebelarse ante las injusticia que padece. Ese tipo de sujetos metódicos hacia el que nos produce empatía, aunque igualmente jamás uno querría parecérsele. Persona siempre calificada de "buena", aunque nunca es tomada en cuenta. Un eterno "anónimo" con nombre, autista sociable gris e insípido, tibio y solitario entre gente, sordo ante lo que se piensa de él, y mudo sobre lo que él piensa de ello y sobre los demás. Fascinante personaje, resumen dialéctico de lo que el sistema querría por millones, un autómata de pasiones autorreprimidas, que respira sin aspirar, que existe sin vivir, y que a la postre muere sin gozar.
Si saber contar la íntima historia de alguien tan introspectivo, tan misterioso, entreteniendo y provocado proofundos sentimientos no es crear una obra de arte, y no entender que lo es, pues el crítico no tiene sentimientos, humanidad o cerebro.
He conocido varias personas con estas cualidades, siempre me parecieron tristes virtudes las que poseían. Algo que hable de los nunca recordados ni recordables, me parece un tributo merecido, sin dudas...